Qué triste…que triste tener que pagar para gozar de emisiones de “calidad”. De hecho, en México “Televisa” y “Tv Azteca” son los canales más fuertes, ambos de pago, con una cobertura de 3 canales a nivel nacional y 1 canal local para cada estado al interior de la República y 2 canales nacionales y emisiones locales con duraciones de 30 a 60 minutos para el interior de la República respectivamente.
Indiferentemente al tipo de programación que ofrecen estos canales (ese, sería otra tema), tanto los datos, como la propia sociedad, habla de la televisión pública como “basura”.
Nos encontramos, así, en una situación difícil: si la única televisión que “garantiza” la veracidad, independencia y pluralidad de información no es más que un “feo” segundo plato entre la sociedad que no habla precisamente bien de esta y que, por otro lado, se informa básicamente por este medio de comunicación de masas… las empresas informativas tienen un dominio casi absoluto de la información que circula entre la mayor parte de la población mexicana… ¿Cómo podríamos resurgir los medios públicos para su consideración y respeto? ¿En qué han fallado? ¿Por qué, de nuevo, la información juega en un marco mercantil tal y como cualquier otro producto se tratara?
"pan y circus"



